En mi entorno próximo se ha hablado mucho de lo perjudicial que es la leche para el consumo humano. Cómo médico, inmediatamente me pongo a elucubrar cuáles son los motivos por las que podría ser este alimento perjudicial y sin dar muchos rodeos se me ocurren un par de cosas. La medicina occidental considera la leche perjudicial en unos supuestos específicos como son la intolerancia a la lactosa, la alergía a las proteínas de la leche de vaca o la obesidad, porque para quien no lo sepa la leche entera tiene bastantes calorías.
Estos son los argumentos científicos pero, ¿existe realmente un interés por parte de la industria para que la gente beba leche? ¿es realmente indispensable para mantener los huesos en forma? No sé si somos unos inconscientes, pero hace poco leí en internet un artículo promovido por las nuevas medicinas alternativas que emergen en nuestro país, culpando a la medicina occidental (e imagino que a la FDA – Food and Drug administration) por promover el consumo de un alimento que es perjudicial.
Entre los muchos argumentos que sentencian, obviamente sin ningún tipo de estudio científico veraz que los respalden, encontré que la leche producía alergía, asma, cáncer de pulmón, cáncer de ovario…y muchas otras enfermedades que convertirían a la leche en la sustancia que desbancaría al tabaco del primer puesto en el ranking de causalidad de cáncer y enfermedad.
Como os decía entre estos argumentos, me encontré con uno que rayaba la más absoluta demagogia, capaz de convencer a cualquiera. Por qué somos los humanos tan tontos de seguir bebiendo leche, cuando los animales por instinto natural dejan de tomarla después de la lactancia. ¡Acabáramos! A estos señores antisistema habría que tirarles de las orejas, o mucho mejor, dejarles en la selva de las islas de Java para que experimentaran la vida animal, porque es obvio que se perdieron muchos episodios de los documentales de la 2. Los humanos no podemos ni debemos justificar si algo está bien o mal hecho en función de lo que hagan los animales por instinto, porque a fin de cuentas los animales usan ese mismo instinto cruelmente para perpetuar su especie. Esta gente que defiende la irracionalidad del instinto animal, ¿mata a los hijos de sus vecinos como hacen los simios beduínos?, ¿asesinan a sus esposos después de que el predictor de positivo como hacen las mantis religiosas?, ¿comen sus propios excrementos como los elefantes?, ¿trabajan todas la horas que trabajan las abejas para mantener una tradición regia?. Vaya estupidez que las medicinas alternativas, entre ellas la china, vengan a contarnos cuentos de lo bonita que es la naturaleza. Ahora resulta que la acupuntura la practicarían los pingüinos de la patagonia, ¿o para eso no usan los mismos argumentos naturales?. Habría que explicarles que muchos de los productos de herbolario son simplemente ANATURALES. ¿qué animal consume soja instintivamente?, que conste que a mi me encanta.
Lo dicho, cuando el fin es ganar dinero, se dicen muchas cosas, y muchas de ellas sin pasar el filtro que se exige a los avances y recomendaciones médicas y científicas. Si las medicinas alternativas quieren tener un hueco respetable en España, deberían cumplirlas mismas obligaciones éticas, morales y LEGALES que cumple la occidental. Mientras tanto seguiré consumienod leche, que tan bien me sienta, y dejaré de tomarla en el caso de necesitarlo por motivos claros o si nuestra medicina nos alerta de su inconveniencia.